Reconocimiento a una joven y destacada científica platense

Recibió el premio “Estímulo a Jóvenes Científicos” por sus estudios en medicina experimental. Egresada con honores de la Facultad de Medicina de la UNLP, comparte la investigación con la crianza de sus cuatro hijos.
Para Irene Ennis su cuarto hijo vino con un importante reconocimiento bajo el brazo. Con 40 años de edad, fue distinguida por la Fundación Bunge y Born con el premio “Estímulo a Jóvenes Científicos” por sus estudios en medicina experimental.
Luego de una extensa jornada de trabajo la investigadora se hizo un tiempo para charlar con Hoy, sin desatender a sus hijos que jugaban a su lado.
Ennis es egresada con medalla de honor de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y desarrolla su actividad en el Centro de Investigaciones Cardiovasculares, que depende de esa casa de altos estudios y del Conicet. Además es docente de la Cátedra de Fisiología con Biofísica, en la misma unidad académica.
Puntualmente, estaba tomando exámenes finales cuando se enteró del premio. “Fue una gran sorpresa. Me llamó Eduardo Charreau, que todavía era presidente del Conicet y miembro del jurado que me eligió. Pensé que tenía que postularme pero él me aclaró que yo ya lo había ganado”, recordó.
En ese entonces la científica estaba embarazada de 8 meses. Por eso, cuando recibió la distinción el 13 de agosto último lo hizo acompañada de Faustino, de dos meses de vida; Amparo de siete años, Bautista de cinco y Consuelo de dos años.
Respecto a la actividad que desarrolla, al doctora explicó que trabaja en biología molecular en el área de cardiología. Estudia sobre “bases moleculares de la hipertrofia cardíaca”. Es decir, “qué ocurre dentro de las células del corazón para que este órgano aumente su tamaño”. Indicó que es un desorden que lleva a la muerte a millones de personas en el mundo.
Entre los jóvenes científicos de la Argentina, la Fundación eligió a Ennis por sus estudios sobre la fisiopatología de la hipertrofia cardíaca, que fueron publicados en trabajos de relevancia internacional. Además, tuvieron en cuenta que desarrolló “su joven carrera fundamentalmente en nuestro país”.
La especialista remarcó que su tarea en investigación no es “individual” sino en equipo. Por eso destacó el apoyo de sus compañeros de trabajo y, especialmente, del doctor Horacio Cingolani. “Fue mi maestro en todo. El me convenció para que me dedicará a la ciencia”, señaló.
Ennis es investigadora adjunta del Conicet. Pero también le atrae la parte asistencial. No obstante, prefiere no trabajar en el área de salud para poder estar más tiempo con sus hijos. “De ocho a cinco trabajo. Después estoy full time con ellos”, afirmó. Aunque reconoció que presentaciones en congresos o en el Conicet a veces le roban algunas madrugadas.